De todaa la gama de productos para pavimentos de madera, la tarima maciza 100% de la misma especie, es la opción más próxima al entorno, a la naturaleza, y a la vez a la que se le reserva el trato más noble. Tala, corte, secado y mecanizado para ser remitida a destino. Carece de otros procesos industriales.

Un producto concebido para auténticos amantes que podrán disfrutar del confort en su concepción más amplia. Cada porción de superficie es única en todo, hasta en los pequeños crujidos que nos alejan de la soledad y proporcionan gran confort. Regulariza la humedad interior, absorbe ondas acústicas y reduce el consumo energético.

Se consiguen tarimas para interior con multitud de maderas, cada una con su coeficiente de dureza. Actualmente una parte importante de la producción y venta se da en madera de roble por su procedencia y facilidad de tintar y texturizar. También son recomendable las variedades tropicales, que si gozan del sello FSC, son igualmente recomendables siempre que los tonos se avengan a nuestra decoración.

ELEGIR: Por criterio ecológico. Si deseamos un pavimento lineal de aspecto tradicional con el confort que comporta un grueso importante de madera noble. Algunas especies únicamente se comercializan en esta opción.

CONTRAS: Requerimos más grueso, limitación de anchos y variedades de acabado. Viene biselado o microbiselado con las juntas marcada.

Características

GRUESO: Desde 17 a 25 mm.

LARGOS: Se puede confeccionar a medida fija, pero encarece mucho. Lo habitual, aprovechar los largos variados que tienen su origen en el propio árbol. Existe la opción de largos superiores a 4 metros.

ANCHOS: Al ser madera sin más, se adaptará a las condiciones físicas de su entorno; luz, humedad, temperatura. Es por ello que se fabrica en medidas de 9 a 14 cm, ya que cuanto menos volumen, más estabilidad y menos dilatación.

BISEL: Sin, para dar acabado una vez puesto. Microbisel, el más habitual. Bisel, para piezas más anchas o largas.

COLOCACION: Los antiguos pavimentos de madera se fijaban con clavos sobre rastreles fijos o flotantes. El método sigue siendo vigente pero tiene el inconveniente de necesitar mayor grueso: TARIMA + RASTREL = 4 cm aproximadamente.

La opción más constructiva es pegada al pavimento base mediante adhesivos de gran elasticidad, minimizando el crujido y el ruido de la pisada.

SISTEMA: Machihembrado. Con aplicación cola hidrófuga. Consultar necesidad lámina de politeno bajo rastrel. – Con membrana Sikaubon: Una lámina de 3 milímetros, con perforaciones ovaladas para colocar adhesivo. La madera queda aislada del suelo mejorando prestaciones de vibración y aislante.

No hay que descartar la opción de flotante. Gran cantidad de ellas se han dimensionado, secado y barnizado con procesos técnicos que permiten este tipo de instalación. Deben tenerse presente las indicaciones de fábrica.

RESISTENCIA: Según dureza madera, ver tabla. Más delicado que cualquier parquet laminado.

ACABADOS: A parte de las texturas, puede ser barnizado o aceitado, con sus correspondientes pros y contras.

MANTENIMIENTO A LARGO PLAZO: En el caso del barnizado, se requiere un rebajado y barnizado cada 15 o 20 años, según conservación.

GARANTIA:

PRECIO: Medio/Alto.