Al igual que el parquet flotante de madera, este producto también es original de los países nórdicos, que formaron un sándwich con núcleo de aglomerado de madera, una capa superior de laminado HPL (del inglés, High Pressure Laminates) –conocido como Fórmica, Railite, etc- producto de resistencia probada en cocinas y mostradores, y un compensador en la cara posterior. Una vez prensado y machihembrado se puso en el mercado para pavimentos.

Aunque en la actualidad aún existen productos con capa de desgaste de HPL, la mayoría que se ofrecen en el mercado tienen núcleo de MDF normal o hidrófugo y capa de uso formada por una lámina de resinas de melanina. Al enriquecerse los tipos de acabado de las melaninas, con texturas y diseños en tres dimensiones, han llegado al público modelos de gran similitud a la madera real, tonos tintados, envejecidos y de cerámica. Es pues en estos últimos años cuando el parquet laminado, por sus propias cualidades y diseños decorativos, aumenta su difusión tanto para vivienda como para comercio y grandes instalaciones.

La multitud de oferta y gama de precio dificulta sin duda la elección del modelo adecuado. Pero tanto desde nuestra perspectiva de técnicos de la edificación como de la experiencia adquirida, podemos decir que aparte de ofertas puntuales, una diferencia de precio en modelos aparentemente iguales, es debido a diferencias del producto. Si vale algo más, será algo mejor. También diremos que según para que estancia o utilidad cualquier parquet de gama básica, puede ser suficiente.

Como todos los productos, evoluciona mejorando tanto técnicamente como en sus aspectos decorativos. Algunos fabricantes han equipado sus productos con clic de muelle en testas, que facilita la colocación. El grueso más utilizado es el de 8 milímetros, pero también se ofrecen gamas con más grueso de 10, 12 y hasta 14 milímetros, consiguiendo más sensación de confort y es una buena opción para cuando hay que sustituir parquets flotantes de madera con el mismo grueso.

La tendencia general es la de dar más acabados en color y diseño.

En este tipo de pavimento no podemos valorar un producto solamente por su resistencia de desgaste AC. Hay que contemplar los demás aspectos que detallamos en el cuadro de características técnicas; una ver cubiertas nuestras necesidades en este aspecto, nos podemos ocupar en complacer nuestro gusto personal.

ELEGIR: El primer criterio, durabilidad requerida que vendrá indicada por su garantía y un AC4, AC5 o AC6. A partir de aquí el gusto particular de cada persona, reservando la opción de piezas de medida superior cuando veamos que las dimensiones del local van a permitir su lucimiento. Se recomienda el pavimento laminado más que el parquet de madera natural cuando se requiera poco mantenimiento y más resistencia.

CONTRAS: Al no tener las virtudes de la madera, aunque se imita muy bien. La dificultad de encontrar material igual transcurrido un tiempo, y la dificultad de restauración una vez sometido a agresiones superficiales. Cuando no se instala de acuerdo a las condiciones del fabricante, con las debidas juntas de dilatación, el resultado podrá ser nefasto. Leer siempre las instrucciones.

Características

GRUESO: Desde 7 hasta 14 milímetros. Las mejores prestaciones siempre a partir de 8 mm.

LARGOS: Habitualmente entre 120 a 140 centímetros. Algunos modelos hasta 200 y 240 cm.

ANCHOS: Los modelos más comerciales entre 19 y 20 centímetros. Algunos hasta  24 y 25 cm.

VISEL: Mini o micro. De laminado continuo o pintado.

COLOCACION: Flotante sobre lámina aislante. Respetar los metros máximos sin dilatación.

SISTEMA: Clic, con varias opciones.

RESISTENCIA: Al desgaste AC4 / AC5 / AC6. Normativa CE: Clase 23, Clase 32, Clase 33

ACABADOS: Multitud de acabados, resumiéndose en cuatro: Textura mate, veta madera, poro sincronizado, cerámica. Cada una de ellas con diversas variantes según el fabricante.

MANTENIMIENTO A LARGO PLAZO: Sin mantenimiento.

GARANTIA: Según el fabricante, gamas y colecciones, entre 15 y 20 años normalmente. La de colocación, a parte.

PRECIO: Desde modelos económicos hasta igualar los de gama básica de madera.